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***En Sucre, ahora es que hay hombres y mujeres revolucionarios con una elevadísima moral y una impecable gestión de gobierno al servicio de los más humildes con un inmenso caudal de obras ejecutadas de altísimo impacto social***

Los actos aberrantes, indignos y fascistas mediante los cuales incendiaron las instalaciones del Concejo del Municipio Sucre y el intento de destrucción de la sede de la Alcaldía Bolivariana de Sucre, merecen el más contundente repudio y rechazo, cada persona, chavista o no chavista, que atente contra los bienes del pueblo soberano, es un contra-revolucionario y un fascista. En él, la idea de la ética como el conjunto de valores y principicopanavidad2os que determinan la conducta de una persona como ser social, así como sus obligaciones ante su familia y la sociedad, no existe ni existirá.

A todas estas, no voy a profundizar en los hechos, ya que esa es tarea de los organismos de seguridad y judiciales, lo importante es hacer comprender que la ética se nos presenta como factor principalísimo en los modelos de sociedades y en la formación de diversas visiones en los ámbitos económico, político, social y cultural; ante situaciones como esta, la ética socialista se apoya en la lógica de la fuerza colectiva, en lo social (socialismo) por encima del capital (capitalismo); la ética socialista le da sentido y razón al desarrollo de los pueblos, respondiendo a los intereses supremos del ser humano en su conjunto. Eso es lo que nos debe importar, y no que un disociado, o grupos de disociados, aspiren alterar el sabio principio de unidad que nos legó el comandante supremo Hugo Chávez Frías.En este aspecto, los acontecimientos ocurridos en la sede de la Alcaldía Bolivariana de Sucre, ha de valorarse como un acto estrictamente “individual”, de elección de valores y principios distorsionados, que condena la moral colectiva y el sentido común. Recordemos, en nuestro primer Plan Socialista de la Nación (2007-2013), como también en el Segundo Programa de la Patria (2013-2019), se destacan los principios y valores de honestidad, solidaridad, justicia, igualdad, probidad, y muchos otros, basados en un pensamiento profundamente humanista, que establecen una ética y una moral esencial para la construcción de nuestro proyecto revolucionario.En síntesis, sin la aplicación de la ética socialista, sin duda alguna no es viable el socialismo del siglo XXI; y actos como los ocurridos tienden a presentarse usualmente cuando el ser humano cae en la tentación y manipulación de los grandes centros de poder que desde el Imperio siguen el juego estratégico de la mentira y la traición. Por lo cual, todo militante, todas las instituciones públicas, todo ente del Estado, deben ser severos vigilantes de los dictados referentes a esta materia para el fiel cumplimiento a la actuación de sus líderes y al cuestionamiento a los fascistas que vengan de donde vengan hieren a muerte el proceso de pacificación y concordia al cual ha hecho el llamado constantemente nuestro Presidente Nicolás Maduro Moros.

Sin duda alguna, quien contravenga todo lo referente a este campo, como el acto de violencia del cual fue objeto la sede de nuestra Alcaldía Bolivariana de Sucre, debe ser considerado un factor perturbador y contra revolucionario, y es deber señalar, y repudiar con todas las fuerzas de ese amor por la Patria que nos legó el Comandante Supremo Hugo Chávez.

En el municipio Sucre, ahora es que hay hombres y mujeres revolucionarios con una elevadísima moral y una impecable gestión de gobierno al servicio de los más humildes, con un caudal de obras de altísimo impacto social; ya culminadas, y muchas otras en plena fase de ejecución, el gobierno de Alfredo Mendoza es el gobierno del pueblo y para el pueblo; la gestión cumplida está enmarcada en el ejercicio pleno del ideario bolivariano; y la gestión por cumplir, se inscribe en los grandes objetivos históricos del Plan de la Patria. Por esta razón no le auguro ningún éxito a quienes no cuentan con ningún ideario patrio, si no que por el contrario toman como su bandera política hacer una fiesta permanente rindiéndole honores al caos y el desastre.

No obstante, como bolivariano afirmó que a la memoria de Hugo Chávez, a su fidelidad al pueblo, va dedicado nuestro camino revolucionario, seguiremos su obra y siempre leales a su pensamiento decimos con mucho orgullo: “Aquí no se rinde nadie, aquí no se cansa nadie…rendirse es traición, cansarse es falta de conciencia, el que se cansa de una lucha es que no tiene conciencia por más dificultades que haya en el camino”  ¡hoy mañana y siempre seguiremos siendo un Pueblo Victorioso!

 

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